mi cable a tierra

Las emociones se me desbordan cada vez más. Hoy por hoy carezco del don de darles forma, o por lo menos, no con la escritura. Estoy conociendo un mundo incesante, un mundo que te transmite tanto, pero tanto, que no entendes como mierda lo hacen. ¿Sera pura fantasía mía?. Necesito dibujar, necesito probarlo, necesito ver si todas mis emociones pueden vivir infinitamente en un dibujo. Crear... crear mundos desde el caos de uno mismo, si, eso es arte. Definitivamente. Y como me apasiona. Cada manga que leo, cada anime que veo, me salva. Los ojos se me abren, la razón se me estremece, pero aun mas: mi corazón se siente en ebullición al recibir ese mundo de emociones de anda a saber quien. No tiene sentido pensarlo, ni racionalizarlo. Se siente ahí, en el pecho, no en mi cabeza. Se siente en todo mi cuerpo, al temblar, al derramar lagrimas o al sonreír con firmeza. Digamos que... ya mi cerebro dejo de ser el protagonista. Pase a otro lugar, a un lugar donde mis emociones fluyen libremente por todas mis partículas. Luz es energía o la energía es luz, no lo entiendo realmente. Pero desde cierto punto seria como si todos mis chakras estuviesen abiertos o abriéndose. Salvada no es el termino: sanada es mejor. Puede ser algo infantil lo que digo... pero no me importa. Mi gran optimismo a veces me termina dando miedo: o lo pierdo todo o realmente voy a ganar. ¿Existen los triunfos en esta vida? ¿existen los héroes?. ¿Existe, realmente, todo ese mundo de fantasía de amor y amistades, de luchadores y ganadores? Pero... por mas que dude, por mas que mi cabeza razone sobre esos temas... mi corazón, o lo que sea que sea, no deja de creer en ello. ¿Que mejor que intentarlo? ¿que mejor que ser optimista ante todo ante de sucumbirme en la desgracia?. El mundo es sumamente cruel, no, me corrijo: la humanidad lo es. El universo solo se resume en misterio y perfección. Nuestra razón no puede alcanzar el nivel de comprensión necesario para entender todo lo que nos rodea. Nuestra razón nos confunde y nos aleja, nos limita a ser puramente racionales y perder todo lo demás. Quiero abrir todos mis sentidos, todos mis caminos. Quiero sentir las cosas plenamente. La verdad se siente, no se piensa.. tal vez. Y no quiero hundirme en el susto y la vergüenza de como se maneja la humanidad. No quiero seguir horrorizándome. Esta vez no.