el mundo al revés.
Una se planta, posición fuerte.. nada puede derribarnos. Nos miramos al espejo, ¿Que podría salir
mal esta vez?. Siempre pensamos en todo, siempre nos las ingeniamos para tener todo controlado.
No se nos olvida nada. Estamos en guardia, y las cosas tratan de lastimarnos pero nosotras no lo permitimos.
Nos parece atractivo el ser poco humanas, parece. Nos arreglamos lo suficiente para parecernos a las mentiras de la televisión. Y buscamos, inconscientemente, una personalidad estándar a elección para poder imitar. Ellos se ríen de nuestra actitud, y están en todo derecho.. parecemos estúpidas. Vah, somos estúpidas. Sus risas son un alivio, creemos entonces que hay que ser naturales, ser nosotras mismas, que seguiremos siendo atractivas. Pero ellos a pesar de reírse, terminan eligiendo a la más parecida a una modelo, y la que posee la actitud típica que todas queremos tener.
La seguridad la tenemos siempre preparada si debemos aparentar que estamos segurar. Pero nuestra vulnerabilidad es lo que siempre esta a flote. Nos vivimos mintiendo. No tenemos todo controlado, por mas que quisiéramos. Y a veces pensar en todo, hace que no pensemos en lo mas obvio.
Que lindo seria que nada nos derribara. Nos aterra el estar en los pies de alguien. Pero vivir impidiendo que suceda.. realmente no impide nada. Esas cosas no se pueden evitar. Uno se tropieza, porque es humano. Uno no tiene ojos en la espalda, ni en los costados. Miramos para adelante, y así al enfocar en algo, desenfocamos en otra cosa. Y a veces nos tambaleamos, por caminar siempre con tacos. Justo pisamos una baldosa floja, y si llovio, tenemos la suerte de embarrarnos todas. Entonces, toda la producción, toda la seguridad, toda la concentración.. a veces termina jugandonos en contra.
mal esta vez?. Siempre pensamos en todo, siempre nos las ingeniamos para tener todo controlado.
No se nos olvida nada. Estamos en guardia, y las cosas tratan de lastimarnos pero nosotras no lo permitimos.
Nos parece atractivo el ser poco humanas, parece. Nos arreglamos lo suficiente para parecernos a las mentiras de la televisión. Y buscamos, inconscientemente, una personalidad estándar a elección para poder imitar. Ellos se ríen de nuestra actitud, y están en todo derecho.. parecemos estúpidas. Vah, somos estúpidas. Sus risas son un alivio, creemos entonces que hay que ser naturales, ser nosotras mismas, que seguiremos siendo atractivas. Pero ellos a pesar de reírse, terminan eligiendo a la más parecida a una modelo, y la que posee la actitud típica que todas queremos tener.
La seguridad la tenemos siempre preparada si debemos aparentar que estamos segurar. Pero nuestra vulnerabilidad es lo que siempre esta a flote. Nos vivimos mintiendo. No tenemos todo controlado, por mas que quisiéramos. Y a veces pensar en todo, hace que no pensemos en lo mas obvio.
Que lindo seria que nada nos derribara. Nos aterra el estar en los pies de alguien. Pero vivir impidiendo que suceda.. realmente no impide nada. Esas cosas no se pueden evitar. Uno se tropieza, porque es humano. Uno no tiene ojos en la espalda, ni en los costados. Miramos para adelante, y así al enfocar en algo, desenfocamos en otra cosa. Y a veces nos tambaleamos, por caminar siempre con tacos. Justo pisamos una baldosa floja, y si llovio, tenemos la suerte de embarrarnos todas. Entonces, toda la producción, toda la seguridad, toda la concentración.. a veces termina jugandonos en contra.
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